No sé por qué pero últimamente se ha puesto de moda la tarta de queso, hace años que las voy probando allá donde voy y ninguna me gusta tanto como las que yo hago. El problema vino cuando me detectaron la intolerancia a la lactosa, que pensé que debía dejar de tomarla (con lo que me gusta), hasta que un día haciendo la compra vi en la sección «Sin Lactosa» leche condensada con la que poder volver a hacer esta receta.

Eso sí, ya solo la puedo comer en casa, porque todavía a día de hoy no he encontrado ningún establecimiento donde las vendan ya hechas. Pero bueno, para los que nos gusta cocinar, no hay ningún problema, porque aquí os voy a dejar varias recetas para que podáis volver a disfrutar de este delicioso manjar de los dioses.